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Sobre algo muy serio: la bufonería

La bufonería es un asunto muy serio en Onira. Un bufón es un miembro profesional, calificado, altamente educado y muy respetado del Gremio de Bufonería, una ilustre institución que sirve a muchos aventureros en sus viajes y principalmente, a los reconocidos palacios feéricos. El gremio no tiene afiliaciones, por lo que los bufones de ambas cortes feéricas se entrenan en el mismo lugar y con las mismas reglas. Esto los pone en una posición privilegiada para actos diplomáticos entre ambas cortes. Decirle payaso a un bufón en un grave insulto, ser payaso no supone el entrenamiento riguroso que lleva la vida y el trabajo del bufón.

Razas

La mayoría de los bufones son algún tipo de hada, pero existen bufones de todas razas, incluyendo humanos. Normalmente, solo las hadas nobles pueden entrar en el Palacio Radiante, sin embargo, dado el prestigio de un bufón, se le permite ingresar si es un miembro oficial del Gremio.

Entrenamiento

Los bufones certificados poseen una alta educación académica y deben pasar por un entrenamiento riguroso en varias áreas usualmente desde que son pequeños, incluyendo diplomacia, averiguar intenciones, interpretación, esgrima y lingüística.

Reglas

Las reglas y prácticas del Gremio de Bufonería son en su mayor parte secretas, lo que significa que un bufón certificado puede citar reglas al azar y nadie puede decirle que no tiene razón. No obstante, estas son las reglas más conocidas y citadas por los bufones:

  • Un bufón puede elegir a sus propios clientes.
  • Un bufón no tiene afiliaciones, puede trabajar para cualquier corte, grupo u organización.
  • Un bufón debe renovar su licencia todos los años completando una serie de pruebas y obstáculos ridículos.
  • Un bufón puede agregar un cliente a la lista negra del Gremio si así fuere necesario, tras lo cual dicho cliente jamás podrá recibir los servicios de otro bufón certificado.
  • Antes de empezar a trabajar para alguien, el bufón y su cliente deben tomar el té.
  • Los bufones deben ser entrenados en alguna de las escuelas de bufonería aprobadas por el Gremio, que deben contar con altos estándares académicos.

Gremio

El Gremio de Bufonería es también cosa seria, poseen escuelas en todas las ciudades principales donde entrenan niños desde los 12 años en varias disciplinas. No todo es diversión y juegos, pues hay pruebas rigurosas frecuentes y quienes las fallan son devueltos para la casa.

Los bufones deben pasar una prueba final antes de ganar su certificación como bufones del gremio y para mantener esa certificación deben además pasar una prueba similar todos los años conducida en alguna de las escuelas aprobadas por el Gremio. Los interesados en recibir los servicios de un bufón deben dar anotarse en una lista de registro. Una vez un bufón acepte su solicitud, el bufón iniciará una entrevista con el cliente durante una ceremonia de té donde se negociarán los detalles del contrato, que no necesariamente es por escrito, pues un contrato de palabra es suficiente para un bufón y el Gremio lo toma muy en serio. Faltar a un contrato con un bufón significa ganarse la enemistad de todo el gremio.

Las habilidades sociales de los bufones los hacen excelentes compañías para eventos de gala y reuniones con altos nobles y funcionarios, quienes reconocen que un grupo de aventureros que tenga un bufón deben ser importantes y respetados para que el Gremio de Bufonería los honre con uno de sus miembros.

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